Aurora no se durmió (2023): el cuento de siempre contado como nunca

¿Y si Aurora se pinchó pero no se durmió?

Acababa de llegar a la Feria del Libro de Murcia y estaba mirando el cartel donde informaban sobre la distribución de las casetas para poder ir directa a la que me interesaba, que no era donde estaba Judith Romero. Pero, al empezar a caminar, prácticamente me choqué con ella y con su libro, un retelling de La Bella Durmiente que me llamó la atención desde su mismo título. Y allí me quedé, conversando con esta escritora murciana que tanto tiene que contar y a la que considero un auténtico descubrimiento.

Lo que la editorial cuenta

Aurora Campbell, hija del líder del clan, vive atrapada en un cuerpo de quinceañera, a raíz de que en su decimoquinto cumpleaños una atracción inexplicable la condujo a una brillante aguja dorada en medio del bosque (se pinchó, no murió y tampoco se durmió, pero toda su familia sí), hasta que consiga romper la maldición que une tres destinos.

El destino caprichoso le regalará una pista que solo podrá rastrear si se gana la confianza del esquivo Calem Calhoun, aunque ni él ni su oscuro tío se lo pondrán fácil. Pero cuenta con la ayuda de su amiga Daracha, una brillante aspirante a detective que la sacará de más de un apuro en la búsqueda de la verdad.

Un castillo en medio del lago Awe que esconde su secreto. Un legado familiar manchado de sangre y mentiras. Unos sueños que amenazan con hacerse realidad. Unas hadas de polvo y muerte que protegerán a la Durmiente hasta su último suspiro. Y una magia tan escurridiza, que ya se te ha metido por los cinco sentidos.

Lo que te contamos nosotras

Por dentro, lo primero que nos llama la atención es el personaje de Aurora, una protagonista resuelta y marchosa, que nada tiene que ver con la modosita princesa del cuento original. Si esperabas una chica que necesite ser rescatada, este no es tu cuento. Tampoco resulta un cliché el coprotagonista masculino, Calem, a quien conocemos a través de los ojos de Aurora, y que nos conquista desde su primera aparición, envuelta en misterio. Aurora y Calem tienen un problema: su familia duerme y está claro que un beso no puede despertarlos. Además, se les acaba el tiempo para romper la maldición, lo que les empuja a buscar respuestas donde nunca habrían ido a preguntar y a aceptar ayuda de quienes menos podrían sospechar. A partir de aquí, los límites de la realidad y la fantasía se entremezclan de forma brillante para tejer una historia que es a la vez un cuento y algo que podría estar pasando al lado de tu casa. Siempre que vivieras en Escocia, claro.

Rodeando a esta pareja de quinceañeros a la fuerza se encuentra todo un elenco de secundarios de lujo, desde las tres hadas protectoras de Aurora (que conservan los nombres de la versión de Disney, pero ni una sola de sus otras características), hasta la compañera de la protagonista, que tiene tantos arrestos como ella y demuestra estar a la altura de las circunstancias. Todos ellos resultarán ser piezas claves en una trama donde la acción está asegurada; pasan tantas cosas que es imposible aburrirse y muy difícil dejar de leer.

Por otro lado, la ambientación de la novela es un verdadero goce para los cinco sentidos. Judith nos adentra en la Escocia más mágica y ancestral, donde seres de cuento pueden hacerse corpóreos a la vuelta de la esquina, donde todos los castillos tienen su fantasma y todas las ruinas cuentan su historia. Simplemente precioso.

Por fuera, el libro está dividido en 24 capítulos con una introducción y un epílogo que cierra la historia de forma completa. La letra es grande y el estilo muy directo, con una Aurora que narra en primera persona y en tiempo presente todo lo que le va sucediendo. Además, los títulos de los capítulos son casi versos de un poema, y van acompañados de pequeños dibujos alusivos que añaden un toque bello a las páginas. También se incluyen unas cuantas ilustraciones a página completa, pero estas no son tan bonitas.

Valoración general

Aurora no se durmió es un retelling inteligente y muy creativo de un cuento sobre el que no creía que se pudiera escribir nada más. Judith Romero le da una vuelta de tuerca a la tradición y nos presenta una protagonista que no va a esperar dormida a que nadie resuelva sus problemas. Este libro lo tiene todo: magia, maldiciones y un viaje por Escocia que se queda en la memoria. Vale la pena darle una oportunidad.

LO MEJOR: Los castillos y sus peculiares habitantes… No digo más para no arruinar la sorpresa.

LO PEOR: El trasfondo de la Durmiente, que para mi gusto no queda suficientemente explicado. ¡Quería saber más!